UNA PODEROSA HERENCIA

Leon FontaineEntregate

Lo que ha hecho cobrar fuerzas a este hombre que ustedes ven y conocen, es la fe en el nombre de Jesús. Esa fe en Jesús es la que lo ha hecho sanar completamente, como todos ustedes pueden ver. Hechos 3:16 (DHH) 

 A nosotros, como creyentes, se nos ha otorgado el asombroso privilegio de usar el nombre de Jesús, pero tenemos dificultades para comprender su poder inspirador y generador de milagros. A menudo pensamos que es solo la forma como cerramos nuestras oraciones: “En el nombre de Jesús, Amén”. Pero es mucho más que eso, y tenemos que trabajar continuamente para captar la autoridad plena que el nombre de Jesús conlleva. 

Cuando los apóstoles enfrentaban problemas, no hacían oraciones de derrota o suplicantes. Ellos hablaban directamente a los gigantes en su camino y ordenaban a las enfermedades que se fueran en el nombre de Jesús. ¡Ellos confiaban en la autoridad que ese nombre poseía y estaban convencidos de su derecho a usarlo! 

Necesitamos entender esto, porque detrás del nombre de Jesús está todo el poder de Dios. La fe en su nombre, en el hecho de que tenemos derecho a cada promesa y provisión de Dios cuando son reclamados en el nombre de Jesús, actúa como un activador, liberando su poder en nuestras vidas. 

Mi esposa Sally y yo tenemos cinco hijos, y con cada embarazo fuimos enviados a especialistas para exámenes adicionales. El miedo amenazaba con apoderarse de nosotros todo el tiempo, pero elegimos declarar vida a cada bebé en el nombre de Jesús. Por la noche yo ponía la mano en la barriga de Sally y decía: “En el nombre de Jesús, este niño vivirá y será sano y fuerte”, ¡y cada niño nació completamente perfecto! 

Usted también puede hablar con confianza sobre lo que está enfrentando en el nombre de Jesús, sabiendo que no hay nada más poderoso en toda la creación que el nombre de Jesús.