Y ustedes, padres, no hagan enojar a sus hijos, sino más bien edúquenlos con la disciplina y la instrucción que quiere el Señor. Efesios 6:4 (DHH)
Al celebrar hoy el Día del Padre, me gustaría aprovechar esta oportunidad para animar a todos los padres que están leyendo este devocional. Papás, ¡ustedes son muy importantes para sus hijos!
Una cosa que sobresale en la Palabra es el hecho de que Dios diseñó a los hombres para que fueran iniciadores. No digo que las mujeres no deberían iniciar las cosas, pero en las películas y los programas de televisión de hoy en día, a menudo nos muestran que el hombre en la casa parece ser incompetente, incapaz o controlador. Ninguno de estos aspectos es parte del diseño de Dios. Él quiere que los padres participen activamente, y una de las cosas más importantes que los padres pueden iniciar para sus hijos es comprender su identidad.
Cada niño hace preguntas como “¿Soy valioso? ¿Importo? “Tenemos la excelente oportunidad y la responsabilidad de mostrarles a nuestros hijos que, número uno, “Tu eres de gran valía para mí”, y número dos, “Dios te ama aún más de lo que yo podría”. Nosotros podemos dar mucha seguridad y confianza a nuestros hijos al enseñarles estas dos cosas.
El versículo de hoy comisiona a los padres a Tomarlos de la mano y guiarlos en el camino del Maestro. Esta versión crea una bella imagen de la paternidad. Se trata de nutrir, entrenar, amar, cuidar, involucrarse y caminar junto a sus hijos a lo largo de la vida.
Sé que puede ser difícil. La vida nos lleva en muchas direcciones diferentes, pero no se desanime. Usted no estás solo en esto. ¡El Espíritu Santo está en usted, capacitándolo para crear un espacio en su vida e invertir en sus hijos con el fin de que ellos estén listos para tomarse el mundo!