Yo daré nueva vida a tus descendientes, les enviaré mi bendición. Y crecerán como hierba bien regada, como álamos a la orilla de los ríos. Isaías 44:3-4 (DHH)
¿Qué sueños tiene usted para sus niños?
Cuando tenía niños pequeños, a menudo escuchaba esta frase: “Disfrútelos cuando estén jóvenes, porque antes de que se dé cuenta, van a ser adolescentes, ¡y entonces comenzarán los problemas!”
Si bien cada etapa de la paternidad trae nuevos desafíos, debemos ser cuidadosos porque a menudo obtenemos lo que esperamos. Si esperamos que nuestros hijos se rebelen y se alejen de Dios durante su adolescencia, experimentando con drogas, alcohol y sexo prematrimonial, entonces eso es lo que vamos a conseguir.
Ahora bien, no digo que detrás de cada adolescente rebelde haya un padre incrédulo. De ningún modo. A pesar de tener padres cariñosos que hacen todo bien, algunos adolescentes aún pueden elegir equivocarse. Sin embargo, incluso cuando este es el caso, debemos mantener grandes expectativas para nuestros hijos.
Nunca es demasiado tarde para reavivar su fe. Ubíquese en Proverbios 22:6, que dice: “Instruye al niño por el camino que debe seguir; y cuando sea viejo, no se apartará de él”.
Enséñeles que la cultura popular les miente sobre la vida. Según las películas, la vida es divertida cuando se es joven y soltero, pero el matrimonio es horrible y servir a Dios es aburrido. ¡La verdad es que no quiero volver a mis años de adolescencia porque me estoy divirtiendo más ahora que en mis tiempos de adolescencia!
¡El Espíritu Santo puede empoderarnos para tener vidas que sigan creciendo en pasión, cercanía y diversión! Y cuando usted vive guiado por el Espíritu Santo, ¡cada día es una aventura!