You are more glorious and excellent than the mountains of prey.
Psalm 76:4 (NKJV)
Dios lo hace todo de manera excelente. Es Su naturaleza. Salmos 76:4 dice que Él es “glorioso y excelente”, y que Él nos ha dado el deseo de crecer, de sobresalir y de convertirnos más como Él.
Muchos tienen problemas con la excelencia porque lo han enredado con la aceptación. Hablar de excelencia es algo doloroso para ellos, porque sienten que nunca pueden ser lo suficientemente buenos.
La verdad es que somos imperfectos. Tenemos buenas intenciones, pero algo sucede en el camino entre las intenciones y la realidad. Aún el apóstol Pablo sintió lo mismo, diciendo “Decido hacer el bien, pero realmente no lo hago; decido no hacer el mal, pero entonces lo hago de cualquier maneras” (Romanos 7:19-20, El Mensaje).
Pablo estaba frustrado porque sus acciones no estaban a la medida de sus intenciones, pero él descubrió la verdad. Simplemente no hay forma de que seamos alguna vez lo suficientemente perfectos como para merecer una relación con Dios…pero, Dios no espera que seamos perfectos. Por esta razón Él envió a Jesús a arreglar las cosas. Una vez que estamos en una relación con Él, Él nos empodera para vivir correctamente y seguir sus caminos, porque esa es la mejor forma de vivir, pero igual Él nos acepta incondicionalmente.
Con esto en mente, usted puede hacer a un lado cualquier condena que sienta por ser imperfecto y, en todo lo que haga, apunte a la excelencia.
No sé preocupe si usted no es perfecto –nadie espera que lo sea. Usted es amado. Usted es aceptado. Usted es libre de hacer lo mejor que pueda, de vivir al máximo para Dios, sabiendo que puede y que siempre seguirá creciendo y consiguiendo estar mejor con Él.