Destruimos argumentos y toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios, y llevamos cautivo todo pensamiento para que se someta a Cristo.
2 Corintios 10: 5 (NVI)
Parece que la naturaleza humana es comparar lo peor de nosotros con lo mejor de los demás. Estamos enfocados en nuestros defectos, mientras nos damos cuenta de los dones y talentos de los demás.
Mientras tanto, Dios está tratando de convencerlo a través de su Palabra que usted es único por un propósito, y que es increíblemente valioso para él.
La verdadera confianza en usted mismo y su identidad viene de llevar la Palabra de Dios en su corazón.
Usted necesita asegurarse de que usted protege su mente cuando vienen pensamientos negativos a atacarlo. La Biblia no habla de orar por sus pensamientos. Habla de llevarlos cautivos y echar hacia abajo teorías que no estén alineadas con la Palabra de Dios. Y si usted piensa que puede necesitar ayuda médica para estabilizar su estado de ánimo, no se sienta condenado por eso. Busque ayuda tal como lo haría con cualquier otro problema médico.
Gran parte de lo que sentimos es el resultado de nuestro pensamiento habitual. Manténgase meditando en lo que la Palabra de Dios dice sobre usted y lo que usted piensa de sí mismo comenzará a cambiar. Es un proceso, pero con el tiempo usted tendrá más confianza, no de una manera soberbia, arrogante, pero usted sabrá quién es usted, tal como lo hizo Jesús.
Dios no quiere que usted piense que es un don nadie que nunca podría hacer nada grande. Él quiere que usted se levante y tome los increíbles caminos que ha preparado para usted. La verdad es que usted ha sido creado para un momento como este, y ¡con él se pueden hacer grandes cosas!