¿MIEDO DE LO QUE PIENSA LA GENTE?

Leon FontaineEntregate

El miedo a los hombres es una trampa, pero el que confía en el Señor estará protegido. Proverbios 29:25 (DHH)

Hemos estado en una serie sobre seis miedos mortales con los que todos lidiamos y cómo se relacionan con una respuesta bíblica a la salud mental. Hoy debatiremos sobre el temor del hombre, que Proverbios 29:25 llama una trampa.

Cuando nos preocupamos demasiado por lo que las personas piensan de nosotros, esto puede afectarnos en lograr todo lo que Dios tiene para nosotros, e incluso, si no tenemos cuidado, puede alejarnos de servir a Dios. Tememos vernos tontos y podemos vernos severamente limitados y restringidos por las opiniones de los demás.

No digo que nosotros debamos ignorar totalmente cómo se sienten los demás. Eso sería insensible; sin embargo, nunca debemos permitir que el temor por lo que otros piensen, nos impida seguir los caminos de Dios o Su dirección en nuestras vidas. Necesitamos superar este miedo centrándonos en el hecho de que Dios nos acepta completamente, incondicionalmente.

En Lucas 12:4-5, Jesús nos enseña a no temer al hombre, sino a temer a Dios. Él dijo: “A ustedes, mis amigos, les digo que no teman a los que matan el cuerpo pero después no pueden hacer más. Les voy a enseñar más bien a quién deben temer: teman al que, después de dar muerte, tiene poder para echarlos al infierno. ¡Sí, les aseguro que a él deben temerle!”

Lo que Jesús está diciendo aquí es que debemos estar en sobrecogimiento ante Dios. En lugar de usted preocuparse demasiado por lo que otros piensan, considere lo que Dios piensa de usted. Él lo ama incondicionalmente, y de ese amor surge el deseo de complacerlo. Cuanto más usted se concentre en agradar a Dios, menos importará lo que otros piensen de usted.