No seáis perezosos en lo que requiere diligencia; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor, gozándoos en la esperanza, perseverando en el sufrimiento, dedicados a la oración, contribuyendo para las necesidades de los santos, practicando la hospitalidad. Romanos 12:11–13 (LBLA)
¿Alguna vez le falta motivación? De vez en cuando, la mayoría de nosotros tenemos dificultades para mantenernos motivados. Tomamos la decisión de estar saludables, pero dos semanas después, la motivación disminuye.
Sin el impulso, tendemos a volver al comportamiento anterior. Podemos tener las mejores intenciones, pero si no estamos motivados, nos estancamos. La motivación es esencial.
Incluso frente a diferentes factores desmotivadores, usted puede decidir permanecer motivado. Dicho esto, también debemos limitar nuestra exposición a los asesinos de la motivación. Varias cosas pueden matar la motivación, hoy cubriremos dos:
- Límites amplios
Usted no puede estar motivado si está demasiado disperso. Decida cuáles son sus límites; es imposible hacerlo todo. Si usted no puede administrar el tiempo, maneje sus prioridades. No permita que otros dicten cómo pasa usted su tiempo. Establezca prioridades para su tiempo, tanto en el trabajo como en su vida privada.
- Las personas equivocadas
Si usted anda con gente apática, experimentará un bajo nivel de motivación personal. Pase tiempo con personas que se niegan a rendirse. Ellos lo influenciarán para que usted se mantenga motivado.
Profundice y motívese. Cuando se sienta presionado por los problemas, tome la decisión de no dejar que ellos lo desanimen. Conviértase en el tipo de persona que está constantemente motivada.