LA MEDITACIÓN DEL REY DAVID

Leon FontaineEntregate

Por las noches, ya acostado, te recuerdo y pienso en ti; pues tú eres quien me ayuda. ¡Soy feliz bajo tus alas! Salmos 63:7-8 (DHH) 

La Biblia está llena de versículos sobre meditación. Solo mire la imagen detallada que el rey David pintó en su tiempo de meditación en el Salmos 63. 

Cada noche, David se imaginaba a Dios amparándolo bajo Sus alas, levantándolo y ayudándolo a ganar. Se veía a sí mismo como un joven halcón o águila que estaba cuidadosamente protegido bajo alas protectoras. 

David dijo que seguiría a Dios como un pájaro joven sigue de cerca a su madre. Imaginaba la poderosa mano derecha de Dios levantándolo, alcanzándolo en la batalla para levantarlo si caía. 

David entonces imaginaba a sus enemigos, el salmo 63:8–11 (LBLA) dice, pero los que buscan mi vida para destruirla, caerán a las profundidades de la tierra. Serán entregados al poder de la espada; presa serán de las zorras. Mas el rey se regocijará en Dios; y todo el que por El jura se gloriará, porque la boca de los que dicen mentiras será cerrada. 

David ya no les tenía miedo a sus enemigos, porque cuando pensaba que ellos iban contra él, los imaginaba cayendo. Y en lugar de preocuparse por sus detractores, David se imaginaba que sus bocas callaban. 

Tenga en cuenta que solo podemos obtener resultados imaginando lo que Dios ya nos ha prometido, y Él le prometió a David la victoria. Estas eran las imágenes en las que David meditaba para darse fuerza. 

¿Qué está usted imaginando en su tiempo tranquilo con Dios?