Y se decían el uno al otro: «Santo, santo, santo es el Señor todopoderoso; toda la tierra está llena de su gloria.»
Isaías 6:3 (DHH)
La tierra entera está llena de la Gloria de Dios. Está en todo lo que Él ha creado, quiere decir entonces que está a nuestro alrededor, donde quiera que vayamos.
La gloria de Dios no aplica únicamente a las cosas relacionadas con la iglesia, a las cosas espirituales. Toda la creación de Dios le trae la gloria a Él. Cada árbol en ciernes, cada pequeño colibrí, cada montaña y río… le trae la gloria a Él. La próxima vez que esté asombrado de un hermoso edificio o una gran canción, reconozca que todo esto puede traer la gloria a Dios si usted está enfocado correctamente.
¡Si la tierra entera está llena de Su gloria, entonces usted también lo está! Cuando usted triunfa en algo, usando los dones que Dios ha colocado dentro de usted, usted trae gloria a Dios. Cuando usted crea algo hermoso, eso puede traer gloria a Él. Usted es Su creación, entonces, usted le trae gloria a Él.
Su gloria está en todas partes que va, y también lo está Su presencia. Si usted tiene la impresión de que debería hablar a alguien mientras transcurre su día, recuerde que Su presencia está en usted. No se disuada usted mismo de acercarse a otros porque no sabe que decir. ¡Él le dará las palabras!
Y no dude porque que se esté comparando usted mismo con alguien más que usted piensa, es mejor de lo que usted es hablando con la gente. Si Dios lo lleva a alguien, es porque Él quiere que usted le hable. Él no le daría a usted el empujón si Él pensara que usted no fuese capaz.
Comience a ver la gloria de Dios cada día. Entienda cuán vital es usted para su iglesia y cuanta influencia usted tiene dondequiera que va. ¡Usted puede hacer grandes cosas porque usted se parece a su padre celestial!