La confianza siempre se gana

Leon FontaineEntregate

»¡Miren! Yo los envío a ustedes como ovejas en medio de lobos. Sean, pues, astutos como serpientes, aunque también sencillos como palomas. Mateo 10:16 (DHH)

Ver lo mejor de las personas es una gran característica, pero esto puede llevarlo a tener  muchos problemas si no se tiene cuidado.

Si alguna vez usted ha luchado por una relación, incluso cuando ha sentido que no era apropiada para usted, usted sabe de lo que estoy hablando. En lugar de escuchar la voz interior que le dice que tenga cuidado, usted le dio a la persona el beneficio de la duda y continuó permitiéndole entrar… y más tarde se arrepintió.

No estoy diciendo que sea malo el dar a la gente el beneficio de la duda. Para establecer relaciones sanas, necesitamos ejercer la aceptación y el perdón. Me gusta llamar a esta actitud LAF (Love, Accept, Forgive), y se trata de elegir amar, aceptar y perdonar a los demás. Se supone que debemos amar incondicionalmente, aceptar a los demás como son y perdonarlos cuando nos ofenden. Sin embargo, y esto es muy importante, no podemos dejar que LAF se confunda con confianza. La confianza siempre debe ser ganada.

En Mateo 10:16, Jesús nos muestra cómo crear grandes relaciones. Él dice que tenemos que ser “astutos como serpientes” para decidir en quién podemos confiar y “sencillos como palomas” en nuestras propias acciones e intenciones. La realidad es simplemente que no es seguro confiar en todo el mundo. Tenemos que ser astutos. Tenemos que mantener los ojos bien abiertos y estar dispuesto a esperar que la gente se gane nuestra confianza.

Jesús no nos dice que seamos ciegos como murciélagos; ¡él nos está diciendo que seamos sabios y estemos despiertos!

Asegúrese de tomar su tiempo con nuevas relaciones. Es prudente poner a prueba a la gente poco a poco antes de empezar a confiar en ellos donde realmente cuenta.