El amor perfecto echa fuera el temor (el temor no existe), pero el amor completo (completo, perfecto) saca el miedo y ¡expulsa todo rastro de terror! 1 Juan 4:18 (AMPC)
La alegría es más que un sentimiento de felicidad. Es un fruto del Espíritu que puede llevarnos a través de los tiempos difíciles de la vida, dándonos el poder para superarnos. Nosotros, como creyentes, necesitamos mantener nuestra alegría y defendernos de las cosas que nos impiden caminar en esa alegría, cosas como el miedo.
Cuando estamos consumidos por el miedo y la preocupación, no hay espacio en nuestro corazón para la alegría. Pero la buena noticia es que estamos capacitados para superar el miedo. Isaías 41:10 dice: “Así que no temas, porque yo estoy contigo… Te fortaleceré” (NKJV). Y, según 1 Juan 4:18, el amor perfecto echa fuera todo temor.
¿Cómo puede el amor echar fuera el miedo? Bueno, digamos que una mujer que se petrifica con los perros se encuentra con un par de ellos en su camino. Incluso si tiene que desviarse kilómetros de su camino, lo hará para evitar a los perros. Pero si ocurre el mismo escenario, pero su niña de dos años está al otro lado donde se encuentran esos perros gruñones y viciosos, es una historia completamente diferente. Se enfrentaría a esos perros en un abrir y cerrar de ojos. Su amor supera su miedo.
A medida que crecemos en nuestra relación con Dios, la conciencia de que él vive en nosotros y somos amados y fortalecidos por él, nos impulsa a superar los límites del pasado y a hacer cosas que tenemos miedo de hacer.
El miedo no tiene que controlar su vida y no tiene que bloquearlo de caminar en alegría. El amor siempre triunfa sobre el temor, y le permite convertirse en una persona de alegría, coraje y poder.