Por lo tanto, ya que ustedes han sido resucitados con Cristo, busquen las cosas del cielo, donde Cristo está sentado a la derecha de Dios. Piensen en las cosas del cielo, no en las de la tierra. Colosenses 3:1-2 (DHH)
La meditación le ayuda a tener un enfoque claro.
El versículo de hoy nos alienta a poner nuestras mentes en las cosas de arriba. Cuanto más meditemos sobre la bondad, la presencia y las promesas de Dios, más podremos elevarnos por encima de la ira y el temor que amenazan con gobernar nuestra toma de decisiones. La meditación nos ayuda a controlar nuestras emociones, ganar perspectiva y obtener un enfoque más claro, y esto nos fortalece en todos los aspectos de nuestras vidas.
Todos enfrentamos situaciones dolorosas y emocionalmente cargadas en las que tuvimos que tomar una decisión. A menudo, las decisiones que tomamos nos permiten salir del dolor lo más rápido posible, pero estas no son siempre las mejores decisiones. De hecho, es bastante seguro decir que si usted toma decisiones importantes cuando está muy emocionado o cuando se siente afanado, siempre se equivocará.
Por otro lado, si usted aprende a estar en silencio mientras pasa tiempo tranquilo con Dios todos los días, esto es algo increíble. No solo usted tendrá más paz durante momentos altamente emocionales, sino que la sabiduría que necesita llegará. Un principio o una historia bíblica puede venir a su mente, las ideas creativas fluirán, o usted pensará en lo que debes decir para resolver la situación. El Espíritu Santo trabaja con la Palabra que hemos plantado en nuestros corazones para guiarnos y dirigirnos a tomar las mejores decisiones.
Cuando usted está sereno, su enfoque se aclara. Usted ve las soluciones más claramente, y todo lo que se necesita es un hábito diario de crear momentos silenciosos y meditativos con Dios y Su Palabra todos los días.