¿ES EL INFIERNO REAL?

Leon FontaineEntregate

De esta manera se hace realidad el amor en nosotros, para que en el día del juicio tengamos confianza; porque nosotros somos en este mundo tal como es Jesucristo.1 Juan 4:17 (DHH)

Los cristianos a menudo evitan hablar sobre el infierno. Estoy de acuerdo en que debemos mantenernos alejados del enfoque de “conviértase o quémese”, pero no nos vayamos al otro extremo. Si pintamos una imagen del cielo como el derecho de nacimiento de todos sin importar en qué creen, llevamos a la gente por el mal camino.

El cielo y el infierno son reales. El cielo es un lugar preparado para un pueblo preparado (Juan 14:1-6), y la preparación que se necesita para llegar allí es confesar con la boca que usted quiere que Jesús sea su Señor y creer en su corazón que Dios lo levantó de los muertos. Entonces usted es salvo del castigo del pecado, es justificado con Dios y usted recibe Su salvación en espíritu, alma y cuerpo (Romanos 10:9-10).

Esta decisión lo coloca como parte de la familia de Dios (Juan 1:12). Dios declara que ahora usted está justificado ante él. Esto es lo que nos da confianza de que cuando muramos, iremos al Cielo. ¡Usted no puedes “ganar” el Cielo! El cielo es el hogar de la familia de Dios, donde vamos a estar con nuestro Padre, en Su casa (2 Corintios 5:8, Salmo 16:11).

El cielo y el infierno son reales. El deseo de Dios es que cada persona pase la eternidad con él. El infierno no estaba preparado para el hombre, sino para el diablo y los ángeles caídos (Mateo 25:41). Dios es amor, y no quiere que nadie se pierda (2 Pedro 3:9) pero nunca nos forzará a aceptarlo. Él nos ama mucho a todos, pero cada persona debe hacer su propia elección, y tenemos que acercarnos a quienes nos rodean con Su amor para que podamos mostrar a muchas personas que  tienen un amoroso Padre.