conocerán la verdad, y la verdad los hará libres. Juan 8:32 (DHH)
Mucha gente piensa que cuando ellos creen en algo y no se hace realidad, es porque no tienen suficiente fe. Vemos declaraciones en la Biblia como, “No he visto tanta fe”, y automáticamente pienso que esas personas recibieron milagros porque tenían más fe. Pero en la Biblia dice que a todos se les ha dado la misma medida de fe, así que no se trata de tener o no más fe.
La diferencia es que estas personas dominaron creencias erróneas que los estaban limitando, lo que permitió que lo milagroso fluyera sin obstáculos. Cuando tenemos creencias erróneas, nos volvemos de doble ánimo, lo que nos impide recibir de Dios (Santiago 1:5-8).
Ser de doble ánimo es abrigar una mentira o una creencia errónea, y eso se convierte en una creencia opuesta que va en contra de lo que usted está creyendo que es Dios. Cuando usted cree en una cosa pero su mente dice: “Esto no puede suceder en realidad”, tienes dos creencias opuestas en acción. Y cada creencia tiene su correspondiente consecuencia.
Por ejemplo, si usted cree que es estúpido, eso influenciará cada área de su vida, le evitará tener una esposa increíble, ir a la universidad o esperar un aumento. Usted se encontrará viviendo una vida limitada creyendo esa mentira, cuando la verdad es que usted es muy inteligente, capaz y digno como todos los demás. Su vida tiene un potencial ilimitado, pero sus creencias erróneas deben enfrentarse para ver el cambio y el crecimiento.
La buena noticia es que no es necesario luchar contra el diablo ni suplicarle a Dios que usted pueda ver estos cambios. Para experimentar más de lo milagroso, ¡simplemente entre en la Palabra de Dios y la verdad realmente lo hará libre!