ÉL ESTÁ AHÍ PARA AYUDARLO, SIEMPRE

Leon FontaineEntregate

Como el Espíritu Santo no les permitió anunciar el mensaje en la provincia de Asia, atravesaron la región de Frigia y Galacia, y llegaron a la frontera de Misia. De allí pensaban entrar en la región de Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se lo permitió. Hechos 16:6-7 (DHH)

En los últimos días, hemos estado refiriéndonos a la versión amplificada de Juan 14:26 que nos da siete nombres para que el Espíritu Santo nos ayude a entender cómo Él trabaja en nuestras vidas. Uno de los nombres que se le da es el de Ayudante, porque el Espíritu Santo siempre está ahí para caminar con nosotros y guiarnos a través de las circunstancias de la vida.

Algunas veces dudamos en pedir ayuda porque tenemos miedo de lo que la gente va a querer a cambio. El Espíritu Santo nos ayuda sin condiciones. Otras veces, dudamos en preguntar porque queremos que los demás nos vean como independientes y fuertes. El Espíritu Santo quiere que le pidamos ayuda. ¡De hecho, no hay manera en que podamos seguir todos los planes de Dios para nuestras vidas sin Su ayuda!

En el versículo de hoy, el Espíritu Santo ayudó a Pablo llevándolo a donde tenía que ir. Tal vez usted esté en una situación en la que cree que no puede recibir ayuda. No es verdad. El Espíritu Santo puede ayudar. A veces lo hará dándole fortaleza interna, paz o sentido de dirección. O como en el versículo de hoy: le hace sentir incómodo con la dirección a la que va o lo que está haciendo y usted sabe que necesita cambiar las cosas. Otras veces, Él atrae a personas a su vida cuando usted menos se lo espera, personas que le dicen o hacen lo correcto, incluso sin ellos saber que usted necesitaba ayuda.

¡Nunca olvide que Su Padre Dios lo ama y su Espíritu está siempre allí para ayudarlo!