La actitud de ustedes debe ser como la de Cristo Jesús, el cual, siendo por naturaleza Dios, no estimó el ser igual a Dios como algo a que aferrarse, y tomó sobre sí la naturaleza de siervo, y se hizo semejante a los hombres. Filipenses 2: 5-7 (KJV)
En 1 Juan 4:3, la Biblia nos advierte sobre una doctrina anticristo. Dice: “Todo espíritu que no confiese que Jesucristo ha venido en la carne no es de Dios. Y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo” (NKJV).
Cuando leí por primera vez este verso, me preguntaba el por qué negar que Jesús vino en la carne era un problema tan enorme. Pero cuando se piensa en ello, si usted no cree esta verdad fundamental, nunca caminará en la autoridad, el poder y la capacidad que Jesús puso a su disposición como creyente.
Cuando pensamos en Jesús cuando caminaba por el planeta, a menudo pensamos en él como Hijo de Dios, y él lo era. Pero la Biblia también dice que él se limitó a si mimos al convertirse en humano.
Esta es la razón por la que Juan 14:12 dice que usted como creyente hará las obras que Jesús hizo y aún mayores. ¡La revelación contenida en ese versículo es absolutamente increíble!
Es hora de que usted vea que Jesús caminó por el planeta como un ser humano lleno del Espíritu, tal como usted lo es. Él aprendió a crecer en gracia para con Dios y los hombres, estudió la Palabra, y se bautizó en el Espíritu Santo, tal como usted puede hacer. Y él hizo cosas increíbles… ¡al igual que usted puede hacer con el Espíritu Santo dentro de usted!