Por medio de sus heridas, ustedes han sido sanados. 1 Pedro 2:24 (VOICE)
De acuerdo con el versículo de hoy, usted puede ser sano por causa de Jesús.
Hubo un tiempo en mi vida en que tenía astillas óseas en los tobillos por lesiones que tuve cuando era más joven. De vez en cuando, uno de mis tobillos se bloqueaba cuando yo caminaba bastante. El dolor era tan insoportable que una vez casi me desmayo.
Había consultado médicos, que es algo que usted siempre debe hacer cuando esté tratando con un problema de salud, y estaban considerando una cirugía. Mientras tanto, decidí orar. Durante un par de meses, hice con mi palabra promesas de curación de Dios para mis tobillos.
Después de un tiempo, me di cuenta de que mis tobillos se habían dejado de bloquear. La verdad es que si hubiera necesitado la cirugía, habría optado por esa opción sin sentirme mal por ello en lo absoluto. Pero en este caso, la cirugía no era necesaria.
¡Usted puede reclamar las promesas de Dios para su curación también! Inspirado en 1 Pedro 2:24, se puede decir: “Por las heridas de Jesús ustedes han sido sanados. La sanidad me pertenece. No estoy tratando de hacer algo para ser digno de la curación; Puedo sanarme en este momento, por causa de Jesús”.
Basado en Romanos 8:11, se puede decir, “¡Gracias Padre porque tu Espíritu habita en mí! Tú Espíritu resucitó a Jesús de entre los muertos, ¡por lo que él no tendrá problemas para dar vida a mi cuerpo mortal!”
Salmo 103: 2-5 tiene otra gran promesa. Diga: “Padre, no me olvidaré de tus beneficios. Tú perdonaste todos mis pecados y sanaste todas mis dolencias. ¡Tú satisfaces mis deseos con cosas buenas y mi juventud se renueva como las águilas!”
¡Reclame estas promesas e imagine que su sanación está hecha, en el nombre de Jesús!