El Espejo Del Desempeño

Leon FontaineEntregate

Pero quien se fija atentamente en la ley perfecta que da libertad, y persevera en ella, no olvidando lo que ha oído, sino haciéndolo, recibirá bendición al practicarlo.
Santiago 1:25 (NVI)

Hemos estado en una serie en los últimos días que habla sobre los diferentes “espejos” que utilizamos para mirarnos a nosotros mismos. El problema es que pensamos que podemos determinar quiénes somos al mirarnos en esos espejos, pero ellos nos mienten.
El tercer espejo falso a tener en cuenta es el espejo del desempeño.

Es común sentir que nuestro valor depende de nuestro desempeño. Tenemos la tendencia a definirnos por nuestra carrera, nuestros roles de familia y por nuestros logros, pero este espejo se queda corto al definir lo que realmente somos.

La verdad es que usted no se define por lo que hace. Usted es una nueva creación en Cristo.

Cuando usted dio su vida a Cristo, se convirtió en una nueva creación, y esta nueva creación en que se ha convertido es muy especial. Usted tiene la naturaleza de Dios. Es su hijo. Y ahora tiene el poder para superar las dificultades y los malos hábitos de manera altamente eficaz y completamente nueva.

Santiago 1:22 dice de esta manera: Cuando se mira atentamente en la ley perfecta que da libertad (mientras usted medita en la Palabra de Dios y sigue escuchando la gran enseñanza), es como si usted se estuviera mirando en el espejo perfecto. Usted comienza a descubrir que no está definido por lo que ha hecho o ha dejado de hacer. Usted es el hijo de un rey!

Este es el espejo en el que hay que mirarse, el que refleje la realeza en Cristo. Y a medida que comienza a actuar más como el hijo del rey que usted es, usted será bendecido en todo lo que hace.