Además, todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán por haber obedecido al Señor tu Dios. Deuteronomio 28:2 (DHH)
Los niños no tienen problemas para soñar despiertos, sino cuando son adultos, a menudo descartamos este hábito porque creemos que es una pérdida de tiempo. ¡En realidad, es una clave bíblica para caminar en lo milagroso! La Biblia lo llama meditación.
Si usted medita sobre (o sueña con) las promesas de Dios, usted experimentará resultados asombrosos.
Quiero animarlo hoy a que ¡nunca deje de soñar! Es posible que usted haya perdido la esperanza de que las cosas cambien porque usted ya ha intentado anteriormente y no pasó nada. No deje que esto lo desanime. Piense en Deuteronomio 28, que dice que las bendiciones de Dios lo alcanzarán. Porque usted es un creyente, ¡las bendiciones de Dios lo están persiguiendo!
Si usted tiene deudas, imagínese que sonríe cuando el banquero le dice “¡Usted está libre de deudas!” Si usted lucha para que el dinero le alcance, imagínese que ríe con un estado de cuenta bancaria en la mano que muestra cientos de dólares que le quedan a final de mes.
Si necesita curación, lea Romanos 8:11: “Y si el Espíritu de aquel que levantó a Jesús de entre los muertos vive en ustedes, [entonces] el mismo que levantó a Cristo de entre los muertos, también dará vida a sus cuerpos mortales por medio de su espíritu, que vive en ustedes”.
Observe cómo este versículo dice que la curación vendrá. No dice que viene del cielo, sino de su Espíritu EN USTEDES. Porque el Espíritu Santo vive en ustedes, ¡su cuerpo se está curando desde adentro hacia afuera!
Adquiera el hábito de soñar despierto sobre la salud, la prosperidad y que todas las promesas de Dios lo persiguen, y ¡usted experimentará resultados milagrosos!