…pero poco a poco se dejan ahogar por las preocupaciones, las riquezas y los placeres de la vida, de modo que no llegan a dar fruto. Luke 8:14 (DHH)
Me sorprende lo que algunas personas asumen como normal. Por ejemplo, alguien que crece en una situación de abuso aprende a vivir con miedo todos los días. Llega a aceptarlo como normal porque es todo lo que ha conocido.
Aunque aprenden a vivir con miedo, eso no significa que sea cómodo. El miedo trae tormento. Es común ver la evidencia de ese tormento en alguien que está siendo abusado por su cónyuge o en una persona que está confinada en una casa debido a una fobia paralizante. Sin embargo, la vida de muchas personas está controlada por el miedo y ellos no se dan cuenta porque es un tipo de miedo que no reconocen.
El hecho de que el miedo no lo incapacite, no significa que no sea destructivo. ¿Acepta usted la ansiedad, la preocupación y el estrés como si fueran normales? Filipenses 4:6-8 dice que no debemos estar ansiosos por NADA. Y Lucas 8:14 nos dice que el temor y la preocupación ahogarán todo el bien que Dios quiere hacer en nuestras vidas.
Usted nunca fue diseñado para vivir con miedo y Filipenses 4:8 le da la cura simple. Por último, piensen en todo lo verdadero, en todo lo que es digno de respeto, en todo lo recto, en todo lo puro, en todo lo agradable, en todo lo que tiene buena fama. Piensen en toda clase de virtudes, en todo lo que merece alabanza. (DHH)
Usted creerá en aquello en lo que se concentre continuamente. Recuerde Filipenses 4:8. En lugar de miedo, preocupación y ansiedad, la paz y la fe se convertirán en su nueva normalidad.