LOS ÁNGELES NO SON SIEMPRE OBVIOS

Leon FontaineEntregate

No se olviden de ser amables con los que lleguen a su casa, pues de esa manera, sin saberlo, algunos hospedaron ángeles. Hebreos 13:2 (DHH) 

Hemos estado en una serie confrontando algunos conceptos erróneos sobre los ángeles. Hoy vamos a cubrir unos más. 

En primer lugar, quiero dejar en claro que en ninguna parte de la Biblia se nos enseña a orar a los ángeles o hablar con los ángeles invisibles. Como creyentes, nosotros oramos a nuestro Padre Dios, en el nombre de Jesús. 

Y mientras que los ángeles se aparecen a muy pocas personas (a mí nunca se me han aparecido), parece que cuando lo hacen, pueden tomar diferentes formas. A veces, cuando los ángeles se aparecían en la Biblia, la vista era tan impresionante que la gente caía al suelo con miedo. Otras veces, el hecho de que estuvieran hablando con los ángeles no era en absoluto obvio. 

Por ejemplo Josué, en un principio, no parecía saber que el hombre al que conoció en el campo de batalla era un ángel, hasta que le preguntó de qué lado estaba y este le respondió que era el “comandante del ejército del Señor” (Josué 5:14). 

Al parecer los ángeles en ocasiones pueden asemejarse a seres humanos. De hecho, Hebreos 13:2 habla de ser hospitalario con los extraños porque nunca se sabe… ¡es posible que usted esté hablando con un ángel! 

Entonces, solo porque usted nunca haya visto un ángel, no significa que no haya recibido ayuda de uno. Nuestros ojos no siempre están abiertos a los ángeles que nos rodean, pero según Hebreos 1:14, se les ha encomendado ministrar a cada creyente. Los ángeles están a su alrededor, listos para responder a las promesas de Dios que usted declare sobre su vida. ¿No es eso increíble?