EL ESPÍRITU SANTO EN ORACIÓN

Leon FontaineEntregate

De igual manera, el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad. Porque no sabemos orar como es debido, pero el Espíritu mismo ruega a Dios por nosotros, con gemidos que no pueden expresarse con palabras. Romanos 8:26 (DHH)

Como creyentes, es muy importante que estemos al tanto de la presencia, el poder y la provisión de Dios en nuestras vidas. Como hemos estado discutiendo en los últimos días, esta conciencia es lo que nos ayuda a mantenernos firmes contra ataques, a mantener nuestra fe sin importar lo que este mundo nos depare, y a aprender a caminar en sus increíbles promesas cada día de nuestras vidas.

Hoy veamos una cuarta forma en que podemos entrenar a nuestros corazones humanos para que crezcan en esta conciencia: orando en el Espíritu.

Cuando usted ora en el Espíritu, 1 Corintios 14:4 dice, que usted es iluminado, mejorado y recibe energía. Esto le ayuda a superar la negatividad, el miedo y la ira. Ser guiado por el Espíritu Santo en sus oraciones lo ayuda a orar eficazmente por los demás y por usted mismo. También le ayuda a dar gracias a Dios. En esencia, el Espíritu Santo ora la voluntad perfecta de Dios a través de sus labios.

Cuanto más conscientes nos volvemos de la presencia de Dios, más experimentamos Su paz, alegría, coraje y fortaleza. Incluso en medio de una tormenta, usted seguirá confiando en Dios y en Su protección y provisión. Usted crecerá en la Palabra y el Espíritu Santo le ayudará a recordar esos versículos en el momento justo para fortalecerlo.

Intente ser más consciente de la presencia de Dios todos los días. Cada mañana, ore, “Padre, hoy te pido que me ayudes a ser más consciente de ti. Gracias por tu guía y orientación. ¡Tú eres muy bueno!”