Por eso, deben ustedes renunciar a su antigua manera de vivir y despojarse de lo que antes eran, ya que todo eso se ha corrompido, a causa de los deseos engañosos. Deben renovarse espiritualmente en su manera de juzgar, y revestirse de la nueva naturaleza, creada a imagen de Dios y que se distingue por una vida recta y pura, basada en la verdad. Efesios 4:22-24 (DHH)
En el momento en que usted entregó su vida a Cristo, usted recibió una nueva naturaleza… creada a imagen de Dios(Efesios 4:24). Esto significa que usted ya no es quien solías ser.
No estoy diciendo que de repente usted se convirtió en un ángel perfecto. Aunque la nueva naturaleza que usted recibió en su espíritu es la naturaleza de Dios y perfecta, usted no es tan perfecto, a pesar de ser una nueva creación donde mora el Espíritu de Dios. Usted es una obra en progreso. Ahora usted debe dejar que Dios lo transforme en una nueva persona cambiando su forma de pensar (Romanos 12:2).
El versículo de hoy se refiere a este proceso como la suspensión de su conducta anterior, y esto es algo que usted continuará haciendo a lo largo de su vida. Escuchar al Espíritu Santo y leer la Palabra de Dios le ayudará a reemplazar sus viejas creencias y formas de pensar con las de Dios.
A lo largo de este proceso, es importante recordar que usted no es una mala persona que necesita cambiar. ¡Usted es un hijo de Dios! Esa es su nueva identidad, y no es algo que pueda ganar a través de un buen comportamiento; es algo que Jesús ganó por usted y que usted recibió como un regalo cuando decidió confiar en Él.
¡Usted tiene la naturaleza de Dios! ¡Mientras más renueve su mente en la Palabra de Dios para descubrir quién es Él y quién es usted en Cristo, más comenzará usted a tomar decisiones que reflejen esa verdadera naturaleza!