ENFRENTE LA TENTACIÓN Y SALGA VICTORIOSO

Leon FontaineEntregate

Piensen en las cosas del cielo, no en las de la tierra. Colosenses 3:2 (DHH) 

Todo creyente enfrenta tentaciones. Aunque el diablo no tiene el poder de llevarnos a hacer cosas, él tratará de tentarnos para satisfacer necesidades y deseos legítimos de manera incorrecta. 

A muchos de nosotros se nos han enseñado a orar para que Dios nos salve de las tentaciones, como si Él estuviera lejos y fuera reacio a ayudarnos. Pero nada en el Nuevo Testamento nos enseña esto. En cambio, se nos enseña sobre el poder y la habilidad de Dios dentro de nosotros en Cristo para resistir y enfrentar la tentación, y para vivir la increíble vida que Dios quiere que tengamos. 

Entonces, si el poder de Dios está en nosotros para resistir la tentación, ¿por qué todavía enfrentamos dificultades? Depende de dónde tengamos establecida nuestra mente. Nuestro enfoque es la llave que determina si confiamos en el poder de Dios en nosotros para vencer la tentación o dependemos solo de nuestras mentes carnales, es decir, nuestra propia capacidad para pensar, resolver problemas y racionalizar. Cuando fijamos nuestra mente en la provisión que Dios nos ha dado, el poder de Dios obra en nosotros y entonces elegimos usar nuestra fuerza de voluntad para resistir y enfrentar la tentación, y es increíble lo que podemos hacer a través de Él. 

En los próximos días, vamos a seguir hablando de esto, porque cada creyente enfrenta tentaciones. Dar nuestras vidas a Cristo no nos exime de la tentación, y ser tentado no es una señal de que de alguna manera le hemos fallado a Dios. Lo que importa es la forma como respondemos a esa tentación, el primer paso es darnos cuenta de que no estamos solos para enfrentarla. ¡Tenemos al Espíritu Santo en nosotros, lo que significa que tenemos todo lo que necesitamos para enfrentar cada tentación y ganar!