¿Qué es, pues, lo que dice?: «La palabra está cerca de ti, en tu boca y en tu corazón.» Esta palabra es el mensaje de fe que predicamos. Romanos 10:8 (DHH)
Si usted quiere cambiar su vida de donde está ahora a donde quiere estar, usted tiene que entender el versículo de hoy, porque es la clave del éxito en todos los ámbitos de la vida.
Hay dos cosas que se mencionan en este versículo: la boca y el corazón. Hoy hablaremos sobre el corazón, que es muy importante. La Palabra de Dios solo es poderosa si se cree en ella.
Se nos ha enseñado a reclamar la Palabra de Dios en voz alta. Podemos declarar las promesas de Dios, pero el poder no está solo en declararla. Si eso fuera cierto, la Palabra de Dios sería como un hechizo. La Palabra de Dios es verdad y está llena de fe, así que mientras que usted habla y medita en Su Palabra, la fe crece en su corazón. Y cuando usted comienza a creerlo en su corazón, es cuando comienza a caminar en las promesas de Dios para su vida.
Romanos 10:9-11 nos continúa hablando sobre la salvación, por lo que algunos asumen que el versículo de hoy se refiere solo a aceptar a Jesús en su vida y ser salvo. Mientras que hablar y creer ciertamente están involucrados aquí, debemos recordar que la salvación no solo se aplica a la salvación del infierno. En el idioma original, se refería a ser salvo de toda la maldición de la ley, salvo de la enfermedad y la pobreza, y todo lo que amenaza con mantenernos en esclavitud aquí en el planeta.
¿Cuál es la clave de la victoria? ¡Hablar, meditar y creer en las promesas de Dios!
La voluntad de Dios es que vivamos “así en la tierra como en el cielo” (Mateo 6:10). ¡Siga estudiando y reclamando Sus promesas hasta que usted lo crea!